El antipatriotismo
se puede vivir de varias formas.
Quizás el
peor sentimiento sea el deseo de que le vaya mal a tu propio país.
Es muy común
escuchar discursos de vocación política que persiguen la autodescalificación de
la sociedad argentina; un ejemplo claro de ello es aquella vieja frase que se
extendió durante los ´90 que decía que los
argentinos somos unos “garcas”. Claramente, eso es lo que algún sector dominante
nos quería hacer sentir mientras los que llevaban las riendas vendían a destajo
nuestros intereses a precio vil.
Sin
embrago, alguna gente de ideología golpista no termina de sorprenderme. Ahora
el centro de las descalificaciones fue el Estado como agente de apoyo de los
deportistas en los Juegos Olímpicos de Londres 2012. A tal punto, en
diversas redes sociales y en palabras de algunos periodistas de dudosa
credibilidad, se puso en tela de juicio la muy importante actuación de la
delegación argentina y se montaron algunas campañas de desprestigio como la que
expongo a continuación:
Sin embargo, podemos escucchar a continuación las palabras del propio deportista agradeciendo el apoyo del ENARD y la Secretaría de Deportes para su desempeño en Londres 2012
Otra campaña de desprestigio desmantelada...y van..
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